viernes, 20 de marzo de 2009

Destruyendo mitos ekonómikos II


Mentiras sobre devualación y crecimiento

El mayor éxito de los extranjeros que nos gobiernan desde hace años es el de instalar, en nuestra sociedad, la ignorante y falsa noción de que devaluar es algo bueno para la industria.
Y esa es la mentira mas absurda que existe en materia económica, la cual hoy día es repetida por “renombrados energúmenos de toda índole. 

Devaluar es una de las peores medidas que pueda realizar un país que necesita fortalecer su economía, pues precisamente es condenarse a ser une eterna periferia del mundo. Y es exactamente eso lo que quieren los grandes capitales, que seamos un país de cuarta que solo exporte materias primas baratas y que tenga mano de obra cuasi esclava para mandar bajo tierra a picar la piedra y así llevarse los minerales gratis.

Es cierto que en el corto plazo crecen las exportaciones y entran divisas al país, pero lo grave es que si se mantiene la moneda devaluada (como se hizo aquí desde 2002) eso a largo plazo hace que nuestra incipiente industria no pueda jamás acceder a la tecnología que le permita producir mayor cantidad a mas bajo costo y de mejor calidad.
Algo que por cierto, desde tiempos históricos, fue un inconveniente para los países industrializados, pues una industria fuerte en un país provisto de materias primas sería su pesadilla. 

Los ilusos que aún defienden la estupidez de cerrarse al mundo piensan que nosotros mismos podemos producir esa tecnología, pero al respecto ignoran que para producir tecnología se necesitan inversiones muy fuertes y que nadie invierte fuerte en una economía devaluada. Es por eso que la tecnología esta en los países industrializados que no devalúan su moneda pero que promueven que las lacras del tercer mundo si lo hagan para comprarle a estos materias primas baratas o mejor aún miles de hectáreas de tierras fértiles o rebosantes en recursos naturales cuasi regaladas.

Lo primero que hizo Alemania con el plan Marshall, cuando era una pila de cascotes en la posguerra, fue consolidar el marco y darle fortaleza, eso permitió que se creara la inversión necesaria para levantar la economía.
Mantener depreciada una moneda artificialmente es tan grave como mantenerla apreciada de la misma forma, tal fue el caso dado a fines de los 90 con un 1 a 1 artificial.
En este país y ante esta crisis mundial lo que hay hacer es simplemente reducir la presión fiscal. Brazil, nuestro vecino, ya lo ha hecho y logro mejorar significativamente la proyección de su industria, ya en la primera mitad de Febrero produjo mas vehículos que en todo Enero gracias a que el gobierno bajó impuestos a la producción de automotores.

Cuando se produce una devaluación la recaudación impositiva del Estado cae al mismo porcentaje, y es por eso que lo mejor es bajar la recaudación sin devaluar pues la recaudación en si misma se verá afectada de cualquier forma. Pero en la Argentina todo se da al revés, y no solo devalúan sino que además suben los impuestos y agobian aún más a nuestra industria enclenque.

La moneda tiene que valer lo que vale y ese valor se lo dan tanto las reservas como las exportaciones e importaciones. Si le quietasen las absurdas retenciones al agro y le bajaran todos lo impuestos a toda la producción industrial, nuestra economía se haría mas competitiva, sea abaratarían los costos y los salarios no se varían afectados El estado seguiría recaudando lo mismo que si devaluara.
Esto debió hacerlo Menem a fines de los años 90, e incluso también De la Rúa; cuando vino Duhalde ya era demasiado tarde ya que el peso argentino estaba excesivamente sobrevaluado. Se produjo así la devaluación estrepitosa que fue pagada por la clase media argentina. Y por supuesto siempre que hay una pérdida también hay una ganancia, la cual por ese entonces fue exclusiva de los bancos y de las clases altas que fugaron sus capitales al exterior 

Esa ganancia estuvo asociada a que con la moneda sobrevaluada, los últimos años del 1 a 1 los dólares costaban menos de lo que deberían costar. Pero esta diferencia quedó para los bancos (como siempre).
También con una economía devaluada esa diferencia también queda para los bancos, pues venden un dólar excesivamente caro, las clases bajas y medias son las que pagan siempre.
No es cierto, que como dijo el gobierno,  esa diferencia ha quedado en los productores rurales, porque estos a la hora de producir han tenido que acceder a tecnología e insumos a valor dólar; y tampoco ha quedado ninguna diferencia a favor de la industria. 
La verdad es que, luego de la devaluación del 2002, la Argentina no creció, sino que mas bien recuperó el nivel de los 90, pero con el agravante de que en 15 años la población es mayor, y es por eso es que ese “crecimiento”, al cual se lo mal denomina así al compararlo con la caída del 2001, es endémicamente insuficiente y limitado bajo los parámetros de la inversión dada en los años 90, la cual no existe ni existirá jamás en una economía devaluada. 

Es probable que hoy, con la baja de exportaciones y con el saqueo de las reservas, el peso valga menos de lo que vale, pero de todas maneras antes de devaluar lo mejor siempre es bajar los impuestos excesivos que tiene este país para mantener a sus reyes, solo así entonces se podrá recuperar algo del nivel de exportaciones y aumentar el ingreso de divisas.
Al largo plazo sin intervención ocurrirá que el peso se irá acomodando a su valor real dado por las mismas exportaciones, y por las reservas en crecimiento que estas motivan también indirectamente.

Al reactivarse la economía y crecer las exportaciones el peso se apreciará y mejorará el nivel de vida del país, la gente gastará mas y con una moneda mas fuerte y un consumo mas elevado vendrán inversiones de envergadura, lo que a largo plazo motivará el natural nacimiento de una industria mayormente competitiva.

Esto ha hecho por años Corea del Sur, y ahora lo esta haciendo Brasil. Hong Kong por su parte ha mantenido un régimen de convertibilidad por años cuidándose de no exceder la apreciación de la moneda de su valor real, algo que el segundo gobierno de Menem no hizo.
Por cierto antes de que aparezcan los ignorantes K diciendo que los del campo y los industriales piden devaluación aclaro que esto es principalmente porque en este país se vive a corto plazo, pues para todos ellos es la forma mas rápida de mejorar su situación; y de hecho es la forma mas rápida de mejorar a corto plazo toda la economía. Pero si se devalúa mal, como se hizo en 2002, y se mantiene un tipo de cambio fijo inverso al 1 a 1 (o sea depreciado) a largo plazo seguiremos siendo siempre un país mediocre sin inversiones de nada.

Quiéranlo o no el 1 a 1 funcionó muy bien hasta el 95, después la presión fiscal lo demolió atentando contra la economía y el tipo de cambio quedó desactualizado con respecto al valor real. Aún hoy nuestra economía se vale de las inversiones de aquellos años, y es por eso que estamos desactualizados teniendo tecnología de hace 15 años.

Estos reclamos de devaluación son el alivió mas fácil y rápido, y además es mas fácil pedir esto a aun Estado mediocre que pedirle que baje impuestos, algo que por cierto en este país es inaudito y jamás se ha hecho.
La verdad de todo es que los K, como fieles empleados de los grandes capitales, lo que buscan es que caigan las industrias nacionales pequeñas y medianas dentro de las multinacionales, y así mismo que en la producción primaria todos los pequeños y medianos productores se fundan y en su lugar todas las tierras productivas queden en manos de unos pocos extranjeros.
El pueblo entonces estará conformado por una gran masa peronista, analfabeta y maleable.

No hay comentarios: